fractal

24/11/09

Delito - Amor

"Sin embargo, el amor es un delito. ¿Entiendes esto?
(Kokoro, Natsume Soseki, Edit. Gredos)


Comprendo que no sea así, ¿pero, si lo fuera? ¿Y si realmente fuera un delito amar? No estoy pensando en un amor interétnico, como hubiera ocurrido en Sudáfrica durante el apartheid. O en USA, hasta mediados de los '60. O como ocurre entre las diferentes castas en la India.
Estaba pensando (o jugando con la idea) en una relación estándard. Si en verdad estaríamos cometiendo un delito, amando a otro ser. Estoy excluyendo el amor que sentimos hacia nuestras relaciones consanguíneas. Sólo entre adultos.
¿Delito? Porque nos querríamos apoderar del alma, del yo interno, de esa otra persona. Tal vez porque se desearía poseer "algo", que en verdad no se sabe que es. Aquí habría que recordar a San Agustín," uno debe ser capaz de descifrar la diferencia entre el amor y el deseo sexual".

Desearía dejar de lado la perspectiva psicológica; pudiendo recordar a Erich Fromm, para quién el amor era un arte y, como tal, una acción voluntaria que se emprende y aprende. No una pasión que se imponga contra la voluntad de aquel que lo viva.
Delito, pues ese amor nos quitaría energía para otras cosas (en el budismo, Kāma es amor sensual, sexual. Es un obstáculo en el camino hacia la iluminación, pues constituye egoísmo). O al amar a una persona, estaríamos discriminando, "amo a ésta, pero no a aquella".
Además para que hubiera delito, debería haber reglas que así lo marquen. Y, a veces, las únicas reglas están impuestas por nosotros mismos y no por el entorno.
También, para que hubiera delito, en este caso se necesitará un "cómplice".


Lo único que se puede aseverar - sin absoluta certeza - es que toda persona puede llegar a cometer un delito al no amar (en este momento acaban de colapsar mis neuronas, perdón). Esto ya lo han marcado otros, con mejores palabras que las mías.


Nota: (extracto de la introducción realizada por Carlos Rubio) Es en la vida del escritor japonés Natsume Soseki (1867-1916), donde se inserta el reinado del emperador Meiji, el período por excelencia de reformas, de la gran segunda transformación en la historia del pueblo japonés.
"Ética oriental y técnica occidental" (toyo no dotoku, seiyo no gakugei) era una de las consignas que circulaban en el Japón de mitad del siglo XIX.
La literatura del período Meiji, es testimonio de lo entrañablemente caro que sería el precio por prescindir de lo tradicional y asiático y perseguir lo moderno y lo occidental. Se sacrificaba una parte de la identidad cultural.
Natsume Soseki, poeta, ensayista y autor de novelas, es el autor moderno, y a la vez clásico por excelencia, de Japón. Su maestría en el dominio de los más diversos estilos, tanto en prosa como en poesía, le elevan por encima de escuelas, círculos y tendencias. Hablando de su obra, es un tópico mencionar eclecticismo y fusión entre el lirismo descriptivo de hondas raíces japonesas y la capacidad analítica y psicológica de la novela europea de fines del siglo XIX.

11/11/09

Brasil, ¿también es conservador?

Luego de leer esta nota en El País, comencé a pensar que ocurriría por estas latitudes. El primer pensamiento sería que en las universidades públicas, tal vez no suceda; pero en algunas universidades privadas pudiera ser que a la posible "infractora" le hagan una llamada de atención (todo puede ocurrir).
Lo que si no puedo pensar (aceptar) es que por aquí, una estudiante reciba rechiflas, insultos y hasta agresiones por su forma de ir vestida. Tal vez estoy siendo ingenuo en pensar que, como grupo humano, podemos llegar a comportarnos en forma diferente a esos estudiantes brasileños. Se podría enumerar, como resalta la nota en Univisión , que es un bolsón conservador; pero brutos y retrogradas, hay en todas partes. Siempre hay excusas para demostrar un comportamiento vejatorio y poner como pretexto, " estaba vestida indecentemente".
Quiero pensar que en nuestras universidades, no, eso no. Pero tal vez peque de ingenuo y llegado el caso, sea más de lo mismo...

5/11/09

In memoriam

Acabo de leer que falleció Félix Luna. Mucho no puedo decir; solamente: Gracias.
Gracias por Todo es Historia, por Alfonsina y el mar, por Mujeres Argentinas, por querer, al igual que Yo, a la historia.
Se lo extrañará.